-"Hola".
-"Hola, ¿Quién eres tú?".
-"Soy tu pasado, he venido a ver como estás".
-"¿Qué haces aquí? ... ¡Vete! ... No quiero saber más de ti, me lastimas demasiado ... ¡Largo!".
-"Te miro distinta ... Te siento distante.
Me gustaría que me dijeras algo ... ¿Pudiste olvidar aquel amor? El que te puso de rodillas un día, quiero saber si aprendiste a amarte más a ti que a él. Quiero saber qué sientes al regresar tu mente atrás.
¿Extrañas esas noches que pasaste llorando abrazada a tu almohada? ¿Pudiste controlar tu ansiedad por él? ¿Entendiste que no puedes entregar tu corazón a cualquiera?
¿Llegó alguien mejor?
Dime que aprendiste la lección, que no pasé en vano y me iré ...
De lo contrario, estaré detrás de ti, atormentando siempre tu presente.
Me encantará poner el dedo en la llaga cuando yo quiera, hasta que aprendas a defenderte.
Dime que eres fuerte y que nadie más volverá a ver a esa niña indefensa a la que fácilmente estrujaban su corazón.
Dime que no me necesitas más, que no es necesario volver a abrir las heridas ... Dime que ahora eres la mujer fuerte que siempre quise ver.
Sólo dímelo y no regresaré más".
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