Ir al contenido principal

La Historia del Principito y el zorro: Qué es amar

El Principito estaba muy triste porque había conocido más rosas como su rosa en el planeta Tierra y pensaba que su rosa era una mentirosa. Decepcionado, lloraba amargamente cuando de pronto se acercó un pequeño zorro.

– ¡Buenos días!- escuchó que decía alguien desde la lejanía.

– Buenos días- respondió él con educación. Se dio la vuelta pero no vio a nadie.

– ¡Estoy aquí, bajo el manzano!- indicó el zorro. Entonces el niño lo vio.

– ¿Quién eres? ¡Eres muy lindo!

– Soy un zorro.

– ¡Ven a jugar conmigo! Estoy muy triste… – dijo el Principito recordando a su rosa.

– No puedo, no estoy domesticado.

– ¿Qué es domesticar?

– Veo que no eres de aquí- dijo entonces el zorro- ¿Qué buscas?

– Busco hombres… ¿qué es domesticar?

– ¿Hombres? No me gustan. Cazan zorros pero también crían gallinas. Eso sí es interesante. ¿Tú buscas gallinas?

– No, busco amigos. ¿Qué es domesticar?

El zorro explica qué es ‘domesticar’
– Bueno, es algo muy olvidado ya. Significa ‘crear lazos’.

– ¿Crear lazos?

– Sí. Tú eres un niño más, como muchos otros. Tú no me necesitas y yo no te necesito. Pero si me domesticas, tú serás único. Yo sentiré necesidad de ti y tú sentirás necesidad de mí.

– Ah, ya entiendo- dijo el Principito- En mi planeta hay una rosa… Creo que me ha domesticado.

– ¿En tu planeta hay cazadores?

– No.

– ¡Perfecto! ¿Y gallinas?

– Tampoco.

– Bueno, no hay nada tan perfecto…

El zorro suspiró y siguió con su idea:
– Para mí el trigo dorado es todo igual. No me aporta nada. Pero tu cabello es dorado como el trigo, y si me domesticas, cada vez que lo mire, me recordará a ti y entonces será especial. Incluso amaré el sonido entre las espigas. Por favor, domestícame. Así mi vida dejará de ser monótona.

– No sé si tengo tiempo. Busco amigos…

– Pero para tener un amigo, debes domesticarlo. ¡Domestícame!

– ¿Y qué hay que hacer?

– Debes tener mucha paciencia y venir a verme todos los días. Te sientas aquí y solo observas y esperas. Cada día yo iré acercándome más, hasta que pueda sentarme a tu lado y me deje acariciar por ti. Entonces, ya habremos creado lazos de amistad y estaré domesticado.

Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, comenzaré a ser feliz desde las tres. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto; ¡descubriré el precio de la felicidad! Pero si vienes a cualquier hora, nunca sabré a qué hora preparar mi corazón…Los ritos son necesarios: Hacen que tu corazón salga de la rutina y de un brinco de felicidad.

Así el Principito consiguió domesticar al zorro. Pero él tenía que partir.

– Voy a llorar- dijo el zorro.

– Tuya es la culpa. Tú me pediste que te domesticara. Ahora, no ganas nada.

– Sí gano. Por el color del trigo.

– Pero vas a llorar.

– Sí.

El zorro siguió hablando:
– Ahora verás las otras rosas y entenderás lo que te dije. Ve a despedirte de ellas y luego vuelve a despedirme de mí y te contaré un secreto.

El Principito fue a donde estaban las rosas. Efectivamente, ya no le parecían iguales a su rosa.

– No sois como mi rosa- les dijo- Mi flor es única y vosotras no significáis mucho para mí… Mi rosa es aquella a la que cuidé, tapé con un biombo y protegí del frío. Es aquella a la que salvé de las orugas y atendí cada vez que estornudaba. Ella me necesitaba y yo la necesitaba a ella.

Las rosas se sintieron molestas.

Después, el Principito regresó donde el zorro para despedirse de él.

– Adiós- dijo el niño.

– Adiós- dijo el zorro- Pero antes voy a contarte mi secreto: no se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos.

– Lo esencial es invisible a los ojos- repitió el Principito para recordarlo bien.

– El tiempo que perdiste por tu rosa hace que tu rosa sea importante…

– El tiempo que perdí por mi rosa… – dijo el Principito para recordarlo bien.

– Los hombres han olvidado este secreto, pero tú debes recordarlo. Eres responsable de quien has domesticado para siempre.

El Principito se alejó repitiendo todas estas frases a fin de no olvidarse.


Del libro "EL PRINCIPITO" Antoine de Saint-Exupéry

.

El amor crea un vínculo especial: La descripción del amor mediante la metáfora del Principito y el zorro es realmente hermosa. El amor es capaz de crear un lazo invisible que une por siempre a dos seres vivos. No hablamos ya de amor entre personas, porque puede ser amor con una mascota o incluso, por qué no, con una flor. Es un vínculo forjado poco a poco, con paciencia y confianza. Un vínculo de necesidad que hace que ese ser sea único entre millones y millones de seres.

Comentarios

LO MÁS VISTO

LA PRINCESA QUE BUSCA MARIDO

Érase una vez una preciosa princesa que buscaba con quien casarse. Su padre le presentaba nobles y príncipes de todos los reinos cercanos, pero ella quería encontrar el amor verdadero. Por eso, propuso al rey que se casaría con aquel joven (noble o no) que se quedara durante un año al lado del muro de su habitación, esperando que ella lo eligiera. De esa forma conocería a la persona capaz de dejarlo todo por su amor, el joven que de verdad la quisiera con todo su corazón. Así, el rey hizo el anuncio y se presentaron miles de jóvenes. Todos llegaron con mucho ánimo, pero enseguida comenzó el frío invernal, y la falta de alimentos y cobijo hicieron que muchos de los pretendientes decidieran que el amor de la princesa no valía la pena y pronto se marcharon a sus casas. Cuando llegó el verano, la comida y el agua eran prácticamente inexistentes, y el calor hizo que casi todos se marchasen finalmente a sus hogares. Solo un joven decidió quedarse, ya que amaba en secreto a la pri...

LOS TRES CONSEJOS

Una pareja de recién casados era muy pobre y vivía de los favores de un pueblito del interior. Un día el marido le hizo la siguiente propuesta a su esposa:  —"Querida yo voy a salir de la casa, voy a viajar bien lejos, buscar un empleo y trabajar hasta tener condiciones para regresar y darte una vida mas cómoda y digna. No se cuanto tiempo voy a estar lejos, solo te pido una cosa, que me esperes y mientras yo este lejos, seas fiel a mi, pues yo te seré fiel a ti." Así, siendo joven aún, caminó muchos días a pie hasta encontrar un hacendado que estaba necesitando de alguien para ayudarlo en su hacienda. El joven llegó, se ofreció para trabajar y fue aceptado. Pidió hacer un trato con su jefe, el cual fue aceptado tambien .. El pacto fue el siguiente:  "Déjeme trabajar por el tiempo que yo quiera y cuando yo encuentre que debo irme, el señor me liberará de mis obligaciones: Yo no quiero recibir mi salario. Le pido al señor que lo coloque en una cuenta de ahorro...

LA ISLA DE LOS SENTIMIENTOS

Había una vez una isla en la que vivían todos los sentimientos y cualidades del hombre: El BUEN HUMOR, la TRISTEZA, la SABIDURÍA, etc. Incluso el AMOR ❤️. Un día se anunció a los sentimientos que la isla estaba por hundirse. Entonces todos prepararon sus barcos y partieron. Únicamente el AMOR se quedó esperando solo, hasta el último momento. Cuando la isla estuvo a punto de hundirse, el AMOR decidió pedir ayuda. La RIQUEZA pasó cerca del AMOR en una barca lujosísima y el AMOR le dijo: -"RIQUEZA, ¿Me puedes llevar contigo?". -"No puedo porque tengo mucho oro y plata dentro de mi barca. No hay lugar para ti", respondió. Entonces el AMOR decidió hablarle al ORGULLO que estaba pasando en una magnífica barca: -"ORGULLO te ruego, ¿Puedes llevarme contigo?". -"No puedo llevarte, AMOR", respondió el ORGULLO. "Aquí todo es perfecto, podrías arruinar mi barca". Y muy apenado el AMOR dijo a la TRISTEZA que se estaba acercando: ...

LA MUÑECA DE SAL

Una muñeca de sal recorrió miles de kilómetros de tierra firme, hasta que por fin llegó al mar. Quedó fascinada por aquella móvil y extraña masa, totalmente distinta de todo lo que había visto hasta entonces. -"¿Quién eres tú?", le preguntó la muñeca de sal, al mar. Con una sonrisa, el mar le respondió: -"Entra y compruébalo tú misma". La muñeca se metió en el mar; pero, a medida que se adentraba en él, iba disolviéndose lentamentente hasta que apenas quedó nada de ella. Antes de morir y disolverse por completo, la muñeca exclamó asombrada: -"¡Ahora ya sé quién soy!".  Anthony de Mello .

LA ESPOSA DEL REY

Un poderoso rey encontró finalmente el amor. Su joven esposa tenía todas las condiciones que un hombre pudiera desear en la vida. Además de ser hermosa y atractiva, era alegre y entusiasta, con un corazón amoroso siempre abierto a ayudar a los demás. El amor fluía entre ellos como en pocas ocasiones se había visto. En los actos protocolares ella caminaba orgullosa a la par del rey. Muy halagado el monarca pensaba: “Cuánto me quiere. Ella sabe que el protocolo indica que debe permanecer detrás de mí, que mis súbditos pueden ir a prisión si no hacen eso, sin embargo ella me ama tanto que siempre quiere estar a mi lado”. En cierta ocasión, ella se disponía a comer una manzana. Era la última que quedaba y tenía un brillo que la hacía realmente apetitosa. En eso llegó el rey y al ver aquella fruta resplandeciente manifestó su deseo de comerla. Ella lo miró con dulzura, le dijo que era la última que quedaba pero que no tenía problema en compartirla. Tomó un cuchillo, la cortó en ...

LA TRISTEZA Y LA FURIA

Había una vez un estanque maravilloso: Era una laguna de agua cristalina y pura donde nadaban peces de todos los colores existentes y donde todas las tonalidades del verde se reflejaban perfectamente. Un día, hasta ese estanque mágico y transparente, se acercaron a bañarse haciéndose mutua compañía, la tristeza y la furia ... Las dos se quitaron sus vestimentas y desnudas entraron al agua. La furia, apurada como siempre, urgida sin saber por qué, se baño rápidamente y más rápido aún, salió del agua ... Pero como era ciega no distinguía claramente la realidad, así que, desnuda y apurada, al salir se puso la primera ropa que encontró. Y sucedió que esa ropa no era la suya, sino la de la tristeza ... Y así sin darse cuenta de lo que había hecho, vestida de tristeza, la furia se fue. Muy calmada y serena, dispuesta como siempre a quedarse en el lugar donde se encuentra, la tristeza terminó su baño y sin ningún apuro o mejor dicho, sin conciencia del paso del tiempo, con mucha p...

LA FÁBULA DEL CONEJO GENEROSO

En un bosque encantado, vivía un pequeño conejo llamado Nico, quien era conocido por su generosidad y disposición a ayudar a todos los animales del bosque. Si la ardilla Ana necesitaba nueces, Nico las recogía; si el zorro Lucho tenía un refugio roto, Nico lo reparaba; y si la tortuga Toña necesitaba compañía para cruzar el río, Nico estaba ahí, cargándola en su espalda. El conejo trabajaba sin descanso, saltando de un lado a otro para atender las necesidades de los demás. Aunque todos lo apreciaban, muchos comenzaron a dar por sentado su ayuda. Un día, mientras ayudaba a la jirafa Lili a decorar su árbol más alto, Nico se resbaló y cayó. No fue una caída grave, pero al levantarse, sintió un dolor en sus patas traseras. Ese dolor no era solo físico; era también el peso de sentirse siempre necesario para los demás, pero nunca, cuidado. Esa noche, mientras descansaba en su madriguera, Nico miró la luna y suspiró. “Me encanta ayudar a mis amigos, pero ya no tengo fuerzas. Nadi...

EL HALCÓN QUE NO VOLABA

Cuenta una leyenda oriental que hubo un rey al que le regalaron dos crías de halcón. Tras entregárselas al maestro domador para que los entrenara, pasó un tiempo. El domador le dijo al rey que uno de los de los halcones estaba perfectamente entrenado pero que el otro no volaba y no sabía lo que le sucedía, puesto que no se había movido de la rama desde el día de su llegada al palacio ... La situación era tan grave que tenían que llevarle el alimento hasta allí. El rey mandó llamar curanderos y sanadores de todo tipo, pero nadie pudo hacer volar al ave. Entonces encargó la misión a miembros de la corte; pero nada sucedía. Por la ventana de sus habitaciones, el monarca podía ver que el pájaro continuaba inmóvil y al día siguiente publicó un edicto para buscar alguien que pudiese solucionar el problema, hasta que un día hicieron volar al halcón. -"Tráiganmee al autor de este milagro". Dijo el rey. Y enseguida le presentaron a un campesino. -"¿Tú hiciste volar a...

EL NÁUFRAGO

El único sobreviviente de un naufragio llegó a una pequeña isla deshabitada, oraba fervientemente y le pedía a Dios que lo rescatara ... Todos los días miraba al horizonte esperando la ayuda solicitada, pero ésta nunca llegaba. Cansado de no tener respuesta comenzó a construir una pequeña cabaña para protegerse y guardar sus pocas posesiones. Un día, después de andar buscando comida, regresó y encontró su pequeña choza envuelta en llamas, una columna de humo subía hacia el cielo. Por fin logró apagar el incendio y aunque lo peor había pasado, todas sus cosas se habían perdido. Estaba confundido y su ira se desató contra Dios: -"¿Cómo pudiste hacerme esto?" gritaba, llorando de impotencia. Abrumado y desconsolado, se quedó dormido sobre la arena. De pronto el sonido de la sirena de un barco que se acercaba a la isla lo despertó ... Venían a rescatarlo. Cuando por fin llegó a la cubierta del barco, preguntó: -"¿Cómo sabían que estaba aquí?". Sus salvadores al...

LA HISTORIA DEL SOL Y LA LUNA

Cuando el SOL y la LUNA se encontraron por primera vez se enamoraron perdidamente y desde entonces comenzaron a vivir un gran amor. El mundo aun no existía y el día que Dios decidió crearlo, les dió un toque final: El brillo. Él decidió que el SOL iluminaría el día y que la LUNA, la noche y por ese motivo estarían obligados a vivir separados. Ambos fueron invadidos por una gran tristeza y se dieron cuenta que nunca más se encontrarían … La LUNA fue quedándose cada vez más triste; a pesar del brillo dado por Dios, ella se sentía sola. El SOL a su vez, había ganado un título de nobleza: "ASTRO REY", pero eso tampoco le hizo feliz. Dios viendo esto los llamó y les explicó: -"Tú, LUNA, iluminarás las noches frías y calientes, encantarás a los enamorados y serás frecuentemente protagonista de hermosas poesías". "En cuanto a ti, SOL, mantendrás ese título porque serás el más importante de los astros, iluminarás la Tierra durante el día, darás ...